Ya van 44 noviembres que existo.
En Salta, la más linda de todas, llegué primera entre tres hermanas siempre unidas de corazón y separadas por 2 mil kilómetros de distancia.
Mi mamá y mi papá se casaron como dios manda y siguen juntos guitarreando al pie de los cerros mientras yo vivo a orillas del mar hace más de media vida.
Aprendí a leer a los 5 años y a escribir al rato y no he dejado jamás de garabatear en servilletas, cuadernos y muros mis "pensaciones" (pensamientos y emociones).
Dramática como pocas, cursi como yo sola, emotiva al cuadrado y nerd desde la cuna crecí, fui abanderada, estudié Turismo y Hotelería, traductorado de inglés (aunque aprendí a hablarlo mirando Friends).
Trabajé en radio y revistas. Fui recepcionista, guía de turismo hasta que una mañana
de julio del 2002...
Una ventanita de messenger, mi anhelo por ser amada y mi poesía al compás de las teclas se abrieron paso en un chat que me cambiaría la vida.
Y apareció él , mi compañero de cielos e infiernos desde hace más de 20 años.
El padre de nuestros 3 amados hijos.
El impulsor de mis mil y un intentos por emprender (tuve barcito, heladería, restaurante, minimercado y ya ni sé qué más).
Mi mamá y mi papá se casaron como dios manda y siguen juntos guitarreando al pie de los cerros mientras yo vivo a orillas del mar hace más de media vida.
Aprendí a leer a los 5 años y a escribir al rato y no he dejado jamás de garabatear en servilletas, cuadernos y muros mis "pensaciones" (pensamientos y emociones).
Dramática como pocas, cursi como yo sola, emotiva al cuadrado y nerd desde la cuna crecí, fui abanderada, estudié Turismo y Hotelería, traductorado de inglés (aunque aprendí a hablarlo mirando Friends).
Trabajé en radio y revistas. Fui recepcionista, guía de turismo hasta que una mañana
de julio del 2002...
Una ventanita de messenger, mi anhelo por ser amada y mi poesía al compás de las teclas se abrieron paso en un chat que me cambiaría
la vida.
Y apareció él , mi compañero de cielos e infiernos desde hace más de 20 años.
El padre de nuestros 3 amados hijos.
El impulsor de mis mil y un intentos por emprender (tuve barcito, heladería, restaurante, minimercado y ya ni sé qué más).
Claro que su cielo y su suelo no eran los míos...y crucé el charco hasta su otra orilla. Mi primer gran dolor, el destierro. Aún hoy la nostalgia me abraza.
Aquí vivo, en Punta del Este y una parte de mí sigue soñando con volver...
La vida nos golpeó al nacer Emi, nuestro segundo hijo, el único varón...no tenía ni un mes cuando casi se nos va.
Tantas etiquetas de secuela...epilepsia, sordera, autismo...ni caso. Me volví su intérprete en lengua de señas, enfermera 24/7 y tanto más.
Salió de mi una fortaleza inesperada a la que hoy llamo resiliencia. Y también salió una oscuridad que no sabía que me habitaba. Salió el odio, el hartazgo, el rencor, el victimismo, el abandono de mí... y me perdí
Seguí funcionando en automático, maternando y buscando la salida sin saber que el camino era hacia adentro.
Me rompí mil veces, me morí de a ratos, resucité por las dudas y por mis hijos. Leí, me autoayudé, conecté con mi herencia ancestral de crear cositas con mis manos, escribí para desagotar el dolor y cuando ya no podía más PEDÍ AYUDA!
Llegué a consulta hecha un trapo de piso, fue de noche y en un auto, fue online como todo lo que cambia mi vida (me acabo de dar cuenta)... la Biodecodificacion y el árbol genealógico me devolvieron la paz y la cordura y me mostraron el camino.
Yo quiero hacer eso, sentí...yo soy eso, recordé. Yo soy la luz que sólo existe porque habité la oscuridad. Yo soy la que acompaña porque sufrí en mi carne la soledad y la distancia.
Yo soy la que le pone palabras al dolor porque las palabras son mi territorio, mi amuleto, mi puente y misión.
Y claro volví a estudiar porque amo aprender. Y no hay un solo día de mi vida en el que no escuche conferencias, lea, tome seminarios y siga siguiendo.
Pero Éste no es mi curriculum... ésto es un pedacito de mi alma.
Yo quiero hacer eso, sentí...yo soy eso, recordé. Yo soy la luz que sólo existe porque habité la oscuridad. Yo soy la que acompaña porque sufrí en
mi carne la soledad
y la distancia.
Yo soy la que le pone palabras al dolor porque las palabras son mi territorio, mi amuleto, mi puente y misión.
Y claro volví a estudiar porque amo aprender. Y no hay un solo día de mi vida en el que no escuche conferencias, lea, tome seminarios y siga siguiendo.
Pero Éste no es mi curriculum... ésto es un pedacito de mi alma.
CONTAME MÁS!
CONTAME MÁS!
La enfermedad no se combate...
se comprende.
Un espacio para comprender, soltar el miedo y transitar a consciencia el diagnóstico.
4 encuentros en vivo,
grabaciones y acompañamiento.
No es tu destino.
Es tu inconsciente.
Imagina poder liberarte de las cargas emocionales que has heredado y, al mismo tiempo, adquirir las herramientas para ayudar a otros a hacer lo mismo.
CONTAME MÁS!
Esto no es otro programa online.
Es terapia para el alma.
Un lapicera y un papel es todo lo que te pido para acompañarte a descubrir el poder sanador de tu voz interior a través de la
Escritura Emocional
LO QUIERO!
No sé en qué lugar del camino te perdiste. no sé qué oscuridad estás habitando.
Lo que sí sé es que si una palabra pudo destruirte, también tus palabras bastaran para sanarte.